Alt Empordà AEM 043_Bàscara
Terraprim de l’Empordà
Bàscara — Galliners — Espasens — Palol de la Farga — Pujals dels Pagesos — Sant Esteve de Guialbes — Terradelles — Vilademuls — Monells — Bàscara
Mapa Comarcal de Catalunya. Gironès. 1:50.000. Institut Cartogràfic de Catalunya
http://www.icc.es/vissir3/
Resumen
Distancia:30 km
Desnivel:490 m
Tiempo:2 h 30 min
Dificultad:fácil
Ruta de contacto
Pedaleando por el Terraprim ampurdanés o Sant Mer y el dragón de Banyoles.
Ruta por el paisaje de transición entre la llanura ampurdanesa y los ásperos de la Garrotxa, un territorio de relieves ondulantes y paisajes agrícolas combinados con zonas boscosas de encinares y pino carrasco que durante el trayecto va alternando pequeñas hondonadas y crestas. Un paisaje que forma parte de lo que Josep Pla bautizó como Terraprim, formado por un mosaico de pequeños núcleos que atesoran a... Pedaleando por el Terraprim ampurdanés o Sant Mer y el dragón de Banyoles.
Ruta por el paisaje de transición entre la llanura ampurdanesa y los ásperos de la Garrotxa, un territorio de relieves ondulantes y paisajes agrícolas combinados con zonas boscosas de encinares y pino carrasco que durante el trayecto va alternando pequeñas hondonadas y crestas. Un paisaje que forma parte de lo que Josep Pla bautizó como Terraprim, formado por un mosaico de pequeños núcleos que atesoran auténticas joyas arquitectónicas, algunas curiosas como la ermita de Sant Mer, personaje ligado a la leyenda del Drac de Banyoles.
Marchamos de Bàscara por el Parque de la Esclusa pasando por lo que queda del hipódromo, las pistas hípicas junto al río Fluvià que debían ser una pieza del gran proyecto de la Ciutat del Cavall de Bàscara. Continuamos por el camino de Sant Baldiri que nos lleva hasta Galliners pedaleando por un paisaje rural que combina grandes extensiones agrícolas y zonas boscosas de encinar, un elemento en común que perdurará durante toda la ruta. En Galliners, encajada entre las callejuelas del pequeño núcleo, destaca la iglesia barroca de Sant Julià edificada sobre los restos de un antiguo templo románico.
Continuamos por carretera, pequeña y solitaria, hasta encontrar la pista que conduce al vecindario de Espasens, donde encontramos la ermita románica de Santa Caterina y, al lado, los restos de muros estructurales del antiguo Castillo de Espasens que fue un sitio de un linaje de la baja nobleza de las comarcas catalanas. Durante el trayecto a Pujals dels Pagesos pasando por Palol de la Farga, vecindario formado por un conjunto de casas centenarias de interés notable, disfrutamos de las mejores panorámicas de la jornada. Fuera de la masa boscosa la mirada abarca un arco visual que va desde las Montañas de Rocacorba a la Montaña del Mont. Y, en medio, todos los relieves del Pla de l'Estany, la Garrotxa, y en días claros, al fondo, los Pirineos del Ripollès.
Inicialmente Pujals dels Pagesos era un vecindario donde vivían los campesinos que dependían de los señores de Pujals dels Cavallers. Tomó personalidad propia a partir del siglo XI, principalmente cuando se erigió la iglesia parroquial de Santa Maria, el edificio principal del pueblo, de estilo románico pero muy transformada. Continuamos la ruta hasta Sant Mer. La ermita reúne muchos devotos y es famoso el encuentro anual que se hace en su honor. Personaje de origen narbonés, fue monje y abad del monasterio de Banyoles al que se le atribuyen muchos milagros. Uno de los más conocidos y que da forma a la hermosa leyenda del Drac de Banyoles, es la liberación de la villa de Banyoles que se encontraba bajo la amenaza de un dragón feroz que se comía a los niños de la villa. Los banyolines y vecinos de la región no dejaban de pedirle favores. Cansado de las multitudes que acudían a él se retiró a la soledad donde está edificada la ermita de Sant Mer. Murió en este lugar en 827. Dice la leyenda que el dragón vivió con el santo totalmente domesticado y dócil y que una vez muerto el Santo la fiera murió de pena.
Continuamos la ruta hasta el pueblo de Sant Esteve de Guialbes. Su iglesia parroquial, dedicada a San Esteban mártir, está documentada en 1064. Corresponde a la iglesia del antiguo castillo de Guialbes, que fue construido a mediados del siglo XI por el conde de Barcelona Ramon Berenguer I, enfrentado con el de Besalú, que había levantado el de Vilademuls. Seguimos hasta Terradelles donde visitamos esporádicamente su iglesia románica de Sant Martí antes de dirigirnos hasta Vilademuls, donde llegamos pasando por su cementerio. Vilademuls fue la sede en el s. XII de la baronía del mismo nombre que estaba dentro de la demarcación del condado de Besalú. Destaca su iglesia románica y el portal y algún muro de la antigua muralla que rodeaba el pueblo y el castillo medieval, del que no queda ningún resto notable. Dejamos el núcleo por la entrada de la antigua muralla y siguiendo las trazas del camino de Sant Jaume llegamos de nuevo a Bàscara.
Febrero de 2024
CENTROS DE INTERÉS
Sant Julià de Galliners. Santa Caterina d’Espasens. Castillo de Espasens. Santa Maria de Pujals dels Pagesos. Sant Mer. Sant Esteve de Guialbes. Sant Martí de Terradelles. Sant Joan de Vilademuls.
ALOJAMIENTOS / RESTAURANTES
https://www.terraprim.cat/
Ruta por el paisaje de transición entre la llanura ampurdanesa y los ásperos de la Garrotxa, un territorio de relieves ondulantes y paisajes agrícolas combinados con zonas boscosas de encinares y pino carrasco que durante el trayecto va alternando pequeñas hondonadas y crestas. Un paisaje que forma parte de lo que Josep Pla bautizó como Terraprim, formado por un mosaico de pequeños núcleos que atesoran a... Pedaleando por el Terraprim ampurdanés o Sant Mer y el dragón de Banyoles.
Ruta por el paisaje de transición entre la llanura ampurdanesa y los ásperos de la Garrotxa, un territorio de relieves ondulantes y paisajes agrícolas combinados con zonas boscosas de encinares y pino carrasco que durante el trayecto va alternando pequeñas hondonadas y crestas. Un paisaje que forma parte de lo que Josep Pla bautizó como Terraprim, formado por un mosaico de pequeños núcleos que atesoran auténticas joyas arquitectónicas, algunas curiosas como la ermita de Sant Mer, personaje ligado a la leyenda del Drac de Banyoles.
Marchamos de Bàscara por el Parque de la Esclusa pasando por lo que queda del hipódromo, las pistas hípicas junto al río Fluvià que debían ser una pieza del gran proyecto de la Ciutat del Cavall de Bàscara. Continuamos por el camino de Sant Baldiri que nos lleva hasta Galliners pedaleando por un paisaje rural que combina grandes extensiones agrícolas y zonas boscosas de encinar, un elemento en común que perdurará durante toda la ruta. En Galliners, encajada entre las callejuelas del pequeño núcleo, destaca la iglesia barroca de Sant Julià edificada sobre los restos de un antiguo templo románico.
Continuamos por carretera, pequeña y solitaria, hasta encontrar la pista que conduce al vecindario de Espasens, donde encontramos la ermita románica de Santa Caterina y, al lado, los restos de muros estructurales del antiguo Castillo de Espasens que fue un sitio de un linaje de la baja nobleza de las comarcas catalanas. Durante el trayecto a Pujals dels Pagesos pasando por Palol de la Farga, vecindario formado por un conjunto de casas centenarias de interés notable, disfrutamos de las mejores panorámicas de la jornada. Fuera de la masa boscosa la mirada abarca un arco visual que va desde las Montañas de Rocacorba a la Montaña del Mont. Y, en medio, todos los relieves del Pla de l'Estany, la Garrotxa, y en días claros, al fondo, los Pirineos del Ripollès.
Inicialmente Pujals dels Pagesos era un vecindario donde vivían los campesinos que dependían de los señores de Pujals dels Cavallers. Tomó personalidad propia a partir del siglo XI, principalmente cuando se erigió la iglesia parroquial de Santa Maria, el edificio principal del pueblo, de estilo románico pero muy transformada. Continuamos la ruta hasta Sant Mer. La ermita reúne muchos devotos y es famoso el encuentro anual que se hace en su honor. Personaje de origen narbonés, fue monje y abad del monasterio de Banyoles al que se le atribuyen muchos milagros. Uno de los más conocidos y que da forma a la hermosa leyenda del Drac de Banyoles, es la liberación de la villa de Banyoles que se encontraba bajo la amenaza de un dragón feroz que se comía a los niños de la villa. Los banyolines y vecinos de la región no dejaban de pedirle favores. Cansado de las multitudes que acudían a él se retiró a la soledad donde está edificada la ermita de Sant Mer. Murió en este lugar en 827. Dice la leyenda que el dragón vivió con el santo totalmente domesticado y dócil y que una vez muerto el Santo la fiera murió de pena.
Continuamos la ruta hasta el pueblo de Sant Esteve de Guialbes. Su iglesia parroquial, dedicada a San Esteban mártir, está documentada en 1064. Corresponde a la iglesia del antiguo castillo de Guialbes, que fue construido a mediados del siglo XI por el conde de Barcelona Ramon Berenguer I, enfrentado con el de Besalú, que había levantado el de Vilademuls. Seguimos hasta Terradelles donde visitamos esporádicamente su iglesia románica de Sant Martí antes de dirigirnos hasta Vilademuls, donde llegamos pasando por su cementerio. Vilademuls fue la sede en el s. XII de la baronía del mismo nombre que estaba dentro de la demarcación del condado de Besalú. Destaca su iglesia románica y el portal y algún muro de la antigua muralla que rodeaba el pueblo y el castillo medieval, del que no queda ningún resto notable. Dejamos el núcleo por la entrada de la antigua muralla y siguiendo las trazas del camino de Sant Jaume llegamos de nuevo a Bàscara.
Febrero de 2024
CENTROS DE INTERÉS
Sant Julià de Galliners. Santa Caterina d’Espasens. Castillo de Espasens. Santa Maria de Pujals dels Pagesos. Sant Mer. Sant Esteve de Guialbes. Sant Martí de Terradelles. Sant Joan de Vilademuls.
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https://www.terraprim.cat/