Alt Urgell AUR 031_Valldarques

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Espai Natural Protegit Serra d’Aubenc i Roc de Cogul. Pical de Castellars. Pla de Tolustre.

Valldarques – Santa Maria de Remolins – Gavarra – Valldarques
Mapes Comarcals de Catalunya. Alt Urgell. 1:50.000. Institut Cartogràfic de Catalunya (ICC)

Resumen

Distancia:27 km
Desnivel:750 m
Tiempo:2 h 45 min
Dificultad:media

De Valldarques a Gavarra. Vuelta al Pical de Castellars.

Desde Valldarques, núcleo ubicado en el valle del mismo nombre, un valle engullido por desfiladeros y riscos, se remonta hasta el Plan de Tolustre, un paraje de idílica belleza y totalmente aislado, y desde ahí se encamina hacia el pequeño núcleo de Gavarra, ubicado en una colina desde donde se dominan los profundos barrancos de la cabecera del Rialp. Un viaje espectacular por un territorio solitario y desconocido, que me...
De Valldarques a Gavarra. Vuelta al Pical de Castellars.

Desde Valldarques, núcleo ubicado en el valle del mismo nombre, un valle engullido por desfiladeros y riscos, se remonta hasta el Plan de Tolustre, un paraje de idílica belleza y totalmente aislado, y desde ahí se encamina hacia el pequeño núcleo de Gavarra, ubicado en una colina desde donde se dominan los profundos barrancos de la cabecera del Rialp. Un viaje espectacular por un territorio solitario y desconocido, que merece ser descubierto.

Desde la hermosa iglesia de Sant Romá de Valldarques vamos a buscar la orilla derecha del río que baja entre un profundo desfiladero. Pedaleando desde la otra margen nos damos cuenta de la ubicación del núcleo, situado encima de un risco que se hunde repentinamente hacia una hondonada que forma un valle estrecho y agreste de fisonomía muy característica debido a las verticales paredes que lo delimita a ambos lados de río.

Perdemos altura siguiendo el risco de la derecha. Al otro lado de la profunda hondonada, si prestamos atención, nos sorprenderá la torre de defensa que se alza imponente sobre la espesura, residuos del antiguo castillo de Valldarques. Se conoce con el nombre de Torre de la Villa y está rodeada de un recinto de apariencia más tardía, hoy muy dañado. Nos desviamos momentáneamente de la pista principal para visitar el templo románico de Santa María de Remolins. La nave de la iglesia está derrumbada pero el campanario esta perfecto, de hecho era una torre de defensa; además desde la colina podemos entrever la silueta del Cadí por la obertura de la angosta salida del valle.

Un sendero nos devuelve a la pista principal que seguimos hasta que salimos del valle. Nueva pista que nos sube emboscados hasta el Pla de Tolustre, una llanura alta enmarcada por los relieves de la cara norte de la sierra de Aubenç y los del Pical de Castellars. Un valle de ensueño donde la soledad invita a malversar el tiempo para disfrutar del mismo. Una masía, Cal Pita o la Borda (?), atrae poderosamente nuestro interés y obliga a cambiar ligeramente el camino para visitarlo. Sus muros de grandes sillares y los cobertizos le dan al conjunto un cierto aire de nobleza rural que no deja indiferente.

Cruzamos todo el altiplano que parece cultivado en parte de encinas truferas, por el único paso por donde desagua el torrente que va a encontrar en el río Rialp y enfilamos hacia el objetivo de la ruta, el pueblo de Gavarra. La inmejorable ubicación del pueblo sobre un promontorio en un contrafuerte de la sierra de Aubenç, constituye un verdadero balcón que regala una amplia mirada sobre los ásperos relieves de las montañas de la cabecera de la baronía de Rialp. En la parte hay un edificio de aspecto medieval, se piensa que podría ser algún resto del antiguo castillo. Destaca también la iglesia románica de Sant Sadurní de Gavarra con un curioso campanario descabezado. Cerca del pueblo, donde está la Fuente de Isot existió desde el s. XII el antiguo convento hospitalario de San Salvador.

Nos vamos cargados de energías renovadas por la pequeña carretera que lleva al pueblo. El rodar silencioso sobre el asfalto que recorre la cresta de la Sierra de Porredon, en un ambiente de alta montaña lleno de amplias panorámicas, invita a la relajación y a disfrutar completamente del entorno. El paisaje obliga a hacer una parada para contemplarlo: la singular morfología de la hondonada de Valldarques se dibuja perfectamente; al fondo las sierras de Carreu, Cadi o Port del Comte, entre otros, y más allá, cerrando la imagen, los relieves ceretanos del Pirineo. Realmente espectacular.

Dejamos el pavimento e iniciamos la bajada inmersos en la espesura del bosque, un agradable descenso que nos regala hacia el final con la majestuosidad de los Robles del Vilars, una docena de remarcables ejemplares distribuidos entre los viejos y fértiles bancales. Uno de ellos está considerado el roble de hoja pequeña con más perímetro de toda Cataluña. De todos modos, se aprecia de forma generalizada cierta recesión en muchos de los árboles.

Mayo de 2018

CENTROS DE INTERÉS

Sant Romà de Valldarques. Torre de la Vila. Santa María de Remolinss. Sant Serni de Gavarra
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